De trabajadora en una lavandería a dueña (La historia de éxito de Ninfa y Alex)

Ninfa tenía 5 años trabajando en una lavandería industrial, sabía todo sobre el negocio, los mejores desmanchadores de ropa, contabilizar cientos de ropa hotelera y elegir la ropa delicada para que sea tratada en lavado al seco ecológico.

Así es que un día Alex, su hijo mayor, le propuso una idea.

¿Por qué no abrimos nuestra propia lavandería?, preguntó él. Ninfa, se entusiasmó al pensar que podría tener su negocio propio. Sin embargo, ella confiaba en el ingreso constante de su trabajo para mantener a su madre y le contestó que aún no era el momento.

Pero Alex se puso en acción, buscó en el Comercio anuncios sobre traslados de lavandería y se animó al encontrar 2 buenas ofertas. Decidió que no perdería nada al ir a ver la lavandería y pedir un mejor precio así que llamó a uno de sus tíos y fue hasta el local.

Resultó que la dueña en ese momento deseaba hacer el traslado inmediatamente así que aceptó la primera propuesta de Alex e indicó que podían tenerla desde el día siguiente. Nadie estuvo más sorprendida que Ninfa quien luego de una llamada al banco aceptó el trato.

Así nació Lavassa SRL, una lavandería familiar la cual empezó brindando servicio de lavado al peso para posteriormente comprar equipos industriales Electrolux y dar lavado profesional a hoteles de 4 estrellas en el distrito de Surco.

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